Los frentes de guerra en la política
Dicen que en política todo se paga y
ese episodio parece que se sigue grabando en la administración de la presidenta
municipal Diana Armenta Armenta, que, viéndola desde la trinchera, pareciera
que tiene varios frentes de guerra en el arranque de su administración.
Hoy, por ejemplo, sale a la luz
pública de que se acató una
observación de la Auditoría Superior del Estado, la que indicaba que es una
ilegalidad pagar sueldos a los directivos del sindicato, quienes habría que
decirlo, ganan y muy bien, de los recursos que le llegan a este municipio que
dicen está en ruinas.
Cuentan que
Alejandro Pimentel, dirigente del sindicato del Ayuntamiento, puso el grito en
el cielo y que buscó acercamiento con funcionarios de primer nivel, pero que la
orden de Diana Armenta es que se procediera a acatar las observaciones de la ASE.
Seguro es que esto
no va a quedar así, pues no creemos que a Pimentel y compañía, le guste
quedarse sin sus jugosas quincenas. Claro, tendrán la opción de reintegrarse a
sus labores, pero quien sabe si les guste o se acuerden cómo se trabaja en sus áreas asignadas.
La duda que todo
guasavense tiene es cómo los gobiernos anteriores solaparon este tipo de
situaciones o si la ASE no había efectuado estas observaciones y si la ex tesorera Angelina Morales pagará ese recurso producto de las observaciones.
Frentes de guerra.
Interesante será ver cómo salen los resultados de síndicos y comisarios y si el PRI logra hegemonía sobre el PAN y el PAS que buscan tener trincheras para lo que se aproxima en el 2018.
Por cierto, nos comentan que quienes gobiernan entraron en desacuerdo con el liderazgo de ENCIMA, brazo que opera el senador Daniel Amador quienes tienen un candidato a síndico en El Burrión y a quien le habrían intentado cerrar el paso.
Por cierto, y ya que hacemos referencia a la disputa de sindicaturas, ¿creerá Blas Rubio que lo van a apoyar en sus aspiraciones a dirigir el Comité Campesino a cambio de su trabajo en el norte del municipio?
Salida
Reactivamos este espacio para escribir en nuestros ratos de ocio (que son muchos). Un saludo a todos y disculpen las faltas de ortografía. Aquí es cuando digo: ¡Extraño a la Patiño!.
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