Feliz cumpleaños, Mariana!

Estos días de nuestros tiempos han sido particularmente distintos. Para empezar, jamás imaginamos estar en medio de una pandemia, mucho menos estar recluidos en una cuarentena impuesta -por seguridad- por el gobierno. Así que Mariana, hoy será un día muy diferente al que probablemente hubieras planeado. ¡Felicidades, hoy es tu cumpleaños! 

No necesito decir que, al igual que tu hermana Miriam, son de lo mejor que la vida me ha dado. Siempre recuerdo cuando llegaste a esta vida. Yo afuera del Seguro Social, desesperado. Supongo que igual de nervioso que cualquier padre que espera ansioso a su retoño. En la pañalera iba lo necesario, incluidas unas pequeñas truzas, con un diseño de página de periódico. Habían dicho que serías niño.

Pasaron los minutos y de la sala de quirófano salió el director y me dijo: ¡Felicidades, su niña está muy sana!

Desde ese entonces, hasta la fecha, puras satisfacciones me han dado. Las mejores hijas, las mejores estudiantes.

Hoy eres una universitaria. Es probable que dentro de un año seas una profesora titulada y seguro estoy que serás la mejor maestra frente al aula, pues te observo desde lejos cuando me ha tocado trabajar en coberturas informativas o cuando realizas tus tareas.

Serás una generación con mucho aprendizaje que seguro transmitirás a tus alumnos, pues aparte de esta pandemia del #Covid19, también te tocó la epidémica de la AH1N1 (influenza) que también mereció la paralización de actividades, no tan extremas como las del coronavirus.

Por si fuera poco, también te ha tocado el desplome del precio del barril de petróleo y que por lo que me comentaste, te sorprendió.

Probablemente hoy no estemos viviendo los mejores tiempos. El pastel lo dejaremos para después, también el bullicio de los demonios de los sobrinos que sólo están a la expectativa de una ocasión para el desastre. Seguro vendrán tiempos mejores.

Esta no es una crónica para Sociales. Aunque me hubiese gustado escribir aquella cuando cumpliste el sueño de las princesas de festejar sus ‘quince’. 

Seguirás escribiendo tus propias páginas de vida, pues nos hemos empeñado que sean independientes, con pensamientos propios, críticas y cuestionadoras.

Para finalizar, quiero decirte que, de todas las páginas que me ha tocado escribir, ustedes son en las que mejor empeño he puesto en la redacción. Con muchas comas, puntos, seguidos y aparte. También paréntesis, porque se ocupan.

Felicidades de nuevo y pendiente el pastel de snicker!